La carga como factor de compra para una enfardadora automática

Como profesionales en el sector, entendemos muy bien que toda empresa busca que sus cargas lleguen a su destino en las mejores condiciones, y de ser posible, como fueron enviadas.

Actualmente, el enfardado se considera un arte, ya que su objetivo se centra en unificar y garantizar un resultado óptimo para que las cargas siempre se mantengan sólidas.

¿Y esto en que afecta a una enfardadora automática? Básicamente en la poca atención que la empresa le da a esta característica, porque normalmente la mayor parte de los compradores pone su vista en el precio.

Sí, el precio de una máquina nueva es algo que siempre se tomará en cuenta, aunque si piensa objetivamente en la carga, podrá encontrar esa enfardadora que se ajuste a sus exigencias.

El enfardado: un arte entre el precio y la efectividad

Antiguamente, hallar la proporción entre el precio de una máquina y su efectividad en el enfardado era visto como un arte.

Normalmente, los compradores se basaban en el ensayo y el error, razón por la cual, el coste tenía un valor referencial muy alto al momento de adquirir una enfardadora.

Sin embargo, hoy en día podemos decir que este rasgo ha cambiado notablemente, porque tenemos a la mano múltiples variables que influyen en la carga, además de poder decidir cómo envolverla de la mejor forma.

Las variables más importantes serían:

  • La fuerza de contención.
  • El peso de la carga.
  • La cantidad de pre-estirado.
  • Y el tipo de film.

Todas tienen un gran peso a la hora de asegurar una carga para que no reciba daños en el viaje.

¿De qué manera la carga afecta en la compra de una enfardadora automática?

Cuando entiendes el tipo de carga que debes manejar ya sea uniforme, inestable, pesada o ligera, sabrás lo que tu máquina debe ofrecerte para superar el enfardado sin problemas.

Lo que también repercute en las peculiaridades con las que debe contar la enfardadora. Entonces, si entiendes el tipo de carga la adquisición será mucho más sencilla.